¡Internacionalicemos la lucha, internacionalicemos la esperanza!

Acto de solidaridad con Lula, celebrado en la Iglesia Bautista Ebenezer de Marianao , cuando se cumplen cien días de su encarcelamiento.

Por Fernando Luis Rojas

Cien días, dos mil cuatrocientas horas, ciento cuarenta y cuatro mil minutos… Hay gobiernos, guerras, competencias deportivas que han durado menos. Parecen números inmensos, pero se van escurriendo y entre viajes al trabajo, noticias fragmentadas y desorganizadas, migraciones y pasiones (extra) futbolísticas se naturalizan. Cien días cumple Lula da Silva en prisión.

Unas horas antes de este fatídico centenario, el sábado 14 de julio, se reunieron unas 150 personas en la Iglesia Bautista Ebenezer del municipio capitalino de Marianao en acto de solidaridad con el exmandatario brasileño. Los participantes pusieron por escrito sus mensajes a Lula y se apropiaron de la consigna/etiqueta #LibertadaLulaAhora. La gente que acudió, entre ellos vecinos del populoso e histórico barrio Pogolotti, miembros de las redes Fe por Cuba y de Educadores Populares, delegados internacionales al encuentro del Foro de Sao Paulo, miembros de movimientos sociales y organizaciones brasileñas, caminaron de la mano de la música e imágenes por la historia de lucha del pueblo sudamericano y su enfrentamiento a la dictadura.

Imágenes del acto ecuménico de solidaridad con Lula, tomadas de la página en fb del Centro Memorial Dr. Martin Luther King Jr.

Los gritos de “Lula libre”, “Lula presidente” y “Lula inocente” dieron paso a varios oradores. Una brasileña de la Coordinación del Movimiento de Afectados por Represas habló de “la lucha que viene en el futuro de Lula junto al pueblo”; un dirigente del Movimiento de Trabajadores sin Tierra (MST) aseguró que “lucharán hasta el último momento porque Lula sea su candidato”, entre otras cosas “porque no creemos en el poder judicial, creemos en la lucha popular”; un representante argentino de ALBA Movimientos destacó el papel de Lula en la historia del Foro de Sao Paulo y otros mecanismo de integración y mencionó, en clave de coordinación internacional de lucha popular contra integración de las formas de dominación, los asesinatos de líderes comunitarios y sociales colombianos y el caso de la dirigente Milagro Sala.

Imágenes del acto ecuménico de solidaridad con Lula, celebrado en la iglesia Eebenzer de Marianao. Fotos tomadas de la página oficial del Centro Martin Luther King Jr. en FB.

Ciento veinticuatro días, dos mil novecientas setenta y seis horas… han transcurrido desde el asesinato de Mirielle Franco. Quizás nos acostumbramos demasiado a leer los acontecimientos de manera fragmentaria, quizás culturalmente la batalla por el individuo ha ganado terreno a la lucha colectiva. Los casos de Mirielle y Lula son expresiones de un mismo fenómeno. Ahora entra en juego la consigna de “no judicializar la política”, pero es más que eso. Ese ánimo pudo respirarse en la intervención de Gleisi Hoffman, presidenta del Partido de los Trabajadores (PT). Según la dirigente, “la mayoría del pueblo es estadística (…) la justicia ha tomado el camino contrario a los pueblos (…) y Lula es un símbolo de resistencia, por eso lo condenan”. Para los participantes, quedó clara la disposición de las organizaciones y movimientos brasileños asistentes de respaldar la candidatura de Lula a la presidencia.

La intervención de Joel Suárez, coordinador ejecutivo del Centro Memorial Martin Luther King, dio cuenta de los vínculos históricos de la institución con Lula y parte de los movimientos sociales brasileños. Más allá de la engañosa “razón de Estado”, la solidaridad es un deber sagrado de los cubanos y en el caso de la comunidad cristiana se afianza en la idea de que la lucha por la justicia, por los pobres, es profundamente cristiana. A propósito, Suárez afirmó que “en época de cinismo y de bandas de ladrones, Lula fue absuelto por la historia y por Dios”.

Este 14 de julio la Iglesia Bautista Ebenezer, en un popular barrio de La Habana, acogió a cristianos y no creyentes con la fe y el deseo de internacionalizar la esperanza.


Comments

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *