Por Julio Antonio Mella
El hecho de que El Machete sea perseguido por la policía de Cuba, América Central y estados fronterizos de los Estados Unidos, indica que es algo más que el primer órgano de los obreros y campesinos mexicanos. Ese semanario es el mejor instrumento de la unidad revolucionaria de todos los oprimidos por el imperialismo en esta zona de la América, y el mejor instrumento de la lucha teórica contra la opresión del capitalismo yanqui, dentro y fuera de las fronteras de los Estados Unidos.
Hacer El Machete más grande, llegar a hacerlo diario, es un deber de todos los revolucionarios y una gran conquista revolucionaria.
La mejor respuesta a las calumnias de la prensa imperialista de Hearst, a las vacilaciones y confusiones de los periódicos nacionales reaccionarios, es crear una potente prensa proletaria independiente, que pueda decir toda la verdad, sin importarle los resultados, puesto que sus fondos provienen de los obreros y no de los capitalistas.
Mis saludos a El Machete en su cuarto aniversario, y mis votos más sinceros por su progreso constante en tirada, simpatías y frecuencia de publicación.
Julio Antonio Mella
El Machete, Núm. 106,
17 de marzo de 1928.
Tomado de Raquel Tibol. Julio Antonio Mella en El Machete. Casa Editora Abril, 2007. p. 21.
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